Marino

Mi pensamiento, el mar, ¡Cuánto te añoro¡
Toda mi vida a ti consagrada,
compañera en mi paz sosegada
en mar calmada o rugir sonoro.
Camarada perfecta, a ti te imploro,
te quiero como se quiere a la amada
con ese beso de alma ilusionada
cuando me cantan tus olas a coro.
Suspiro tu brisa lenta enamorada,
de tu blanca espuma yo me enamoro
al mecerme en tu cama cimbreada.
Eres cuna de soberbio tesoro,
en tu seno guardas velas rasgadas
de fragatas con mascarones de oro. ****
Siguiendo el resplandor de mi lucero,
siempre buscando la estrella radiante,
la fiel compañera del navegante
que ilumina en la noche mi sendero.
En tu brisa mi barco marinero
vuela con gracia airosa desbordante,
yo, llorando mi soledad errante
estando en cubierta de mi velero.
Arribando al puerto de mi consuelo,
singladura final de mi destino
donde se confunde el mar con el cielo,
va atracando un espíritu cansino
y allá en el mar, cubierto con su velo
muere en paz un viejo lobo marino.
Toledano Isleño 1234130600