Siento amor como te sientes,
ansioso y deseoso por perderte y
explorar mi cuerpo que ahora,
lo tienes desnudo ante tus ojos.
Mi piel está salvaje y ardiente,
para tus dedos desbocados.
Tus manos en compañía de,
tus dedos locos por poder,
dibujar mis redondeados y
duros senos llenos de los más,
maravillosos deseos cuan dos,
montañas erguidas y en relieve, que elevan sus cimas de punta muy,
agudas mirando al cielo.
En esos ardientes momentos,
tan seductores, mis pezones,
rodeados por su areola marrón,
que hacen resaltar a la mirada,
de tus ojos cuando los miras,
como se erectan sus puntas,
mientras sus laderas aterciopeladas,
se endurecen por el deseo.
Ellos esperan ansiados ser,
rozados y poseídos por tus,
hambrientos dientes que,
solo desean poder ser seducidos y
lamidos por mi lengua que,
se siente embrujada y ardiente.
Mi lengua se desliza rodeando,
tus pezones, primero uno y
seguidamente después el otro,
haciendo que mi cuerpo y
mis sentidos no obedezcan,
entregándome por completo a ti,
a tus deseos más eróticos.