El mar que me rodea es muy variable,
Depende de las brisas o del tiempo,
El caso es que mi caso, soy de una isla,
Llamada a sumergirse o sumergirse,
En las aguas del océano, humano.
Geografía mi contenido continente.
Como esa isla que ignorada, no olvidada.
Que hay un tesoro muy dentro.
¡Quién sabe si yo tengo, uno hermano!
¡No, doce millones de cubanos!
o tan sólo un pequeño pedazo montaña!
Los árboles del bosque de mi isla,
A esta isla que soy, si alguien llega,
Encontrarme con ellas, algo de mi deseo;
que mantienen los versos encendidos.
Y cascadas de pociones es lo que tengo.
Un nombre que me sube por el alma
Y no quiere que llore mis sentimientos;
Para mí es un placer ser liberada,
Mi lápiz se deshace, si lo cojo y escribo,
Sin patria pero sin amos el apostó lo escribió
Los pájaros anidan en tus brazos. Cubanos
A la sangre encerrada en la botella del cuerpo,
A la sangre derramada por los campos,
A la sangre derramada por los celos,
por los jueces, del destierro. Cubanos.
Bello lo estás disfrutando y yo también al tiempo.
Que encuentro con mi lengua, lo que había soñado.
Llévame a un paisaje yumurí, al rió cauto,
donde solo habitemos los cubanos,
A las montañas del es cambray, a las cierras maestra.
Olvidémonos del rencor y amémonos.
Ámame tan intensamente.
Como el cauce al río.
Como el río a la corriente.
Cubanos seamos unos solos.