Una luz

Hay días cuando todo es triste y sobrio
y aunque el sol despliegue
sus ardientes resplandores,
en el panorama interno, nó se filtra
un rayo de luz que ilumine los rincones oscuros!
Penumbra triste la de los deprimidos!
Ayuda!...a quien voltear a ver?
Si el mundo parece una nube inmensa de soledad?
Tenebrosa es la ansiedad del triste,
sin ver una salida, un camino iluminado.
Hace falta presencias de almas buenas
alrededor de las que habitan en la bruma
de la duda y la inseguridad.
Hay necesidad de manos amigas y sinceras,
que muestren senderos de luz
para salir de los bosques oscuros.
Seres valientes, que alejen a los monstruos
amenazantes en los pensamientos negativos.
Una luz en la oscuridad!
Un arco iris en un cielo tormentoso!
como señal de una solución,
...Donde está esa luz?
Un día, si miramos, nó muy lejos,
la luz brillará, sólamente tedremos
que mirar de frente, sentir su calor,
extender nuestras manos y aceptar la mano
que nos ofrece, sin temor del calor,
...maravilloso calor!...
Es la luz de Jesús, que no debemos rechazar:
-Jesús es el camino, la verdad y la vida,
con él todo, sin él nada-
Trátalo y verás!
(Nó vayas a esperarlo cómodamente
y con desgano, abre tus puertas y ventanas
y verás que tendrás luz para iluminarte
y caminar con paso firme y sin temor alguno) De Noemi Amy de Alvarado (10-04-05