Una de piratas

Con sólo un cañón por banda,

merced a la ventolera,

ondeando una bandera

bucanera ,cual bufanda,

Se divisa en el Atlántico

un barco filibustero,

que más que de pendenciero

tiene aspecto de romántico.

Pero hoy la tripulación

está tan alborotada

que parece amotinada

actuando sin ton ni son.

Su capitán no se arruga

ante ninguna contienda

lo último que ganó en prenda

fue la isla de Tortuga

(y se dice para sí) -

En su puesto no hay ni uno

todos por ahí danzando

¿que es lo que estarán tramando?

¡ por las barbas de Neptuno ! 

Ni por mi parche en el ojo

ni este garfio en vez de mano,

tomen “al Araña” en vano

o les pondré - a remojo-.

Cuando llegó media noche

descartó un levantamiento

viendo al personal contento,

no advirtiendo ni un reproche.

El canto de una sirena

se escuchó en la noche fría

y la luna se mecía

sobre aquella mar serena.

Alguien sorprendió al corsario

y le colocó un pañuelo,

lo hizo con tanto celo

que no se oyó un comentario

-De modo que era un motín

(pensó para sus adentros)

recordó varios encuentros

en los que hubiera un botín

De hecho, le colocaron

frente a él todo un tesoro:

joyas, doblones de oro

y el vendaje le quitaron

(sin inmutarse les dijo ):

-No hay suficientes reaños

esto vuestro es un desliz,

ellos rieron: - Feliz!

¡¡ Feliz, Feliz cumpleaños !!

M J G Campos