Silencio se rueda

Verse ajeno al difunto
difuso poema viajero
que se apaga en unas manos
aterradas en el fuego.
Verde negro estampa el cielo
en este agujero eterno
que disuade al infierno
en su tormento.
Mano inocente cercada al miedo
disfrazado de tierno
manipula el hoyo
profundo y negro.
Muerto o aparente siniestro
regado con el sosiego
de una flor como amuleto
en un mundo ciego.
Rezos y poesia en verso
y un único lamento
no conocer el invierno
desde un locutorio bisiesto.