Lloras, por el amor que no ha sido
en tu ímpetu de mujer apasionada,
en cada lugar de tu cuerpo su latido
en cada segmento del alma..su mirada.
Lloras, y la noche vacía que te envuelve
en sus túnicas perpetuas de silencio,
costumbre de creer en sus manos que devuelven
la soledad sedienta que mece entre tus vientos.
Lloras, la deslealtad y la mentira
con una lágrima que despertó mis duendes,
te cobijo en mis adioses y tranquila
quieres depositar tus besos donde duelen.
Lloras, mujer que al desengaño
vives dormida la pausa de su orgullo,
lloras, y no te das cuenta que los años
llegan de golpe sin dejar de ser tuyos.