Un año menos de vida,
con alguna cana más,
un balance de caricias
el dinero, ¡ni mirar!
Las velas ya son docenas,
apiñadas. nada más
Las pérdidas son ganancias,
el saber, no ocupa lugar;…
la experiencia poco sirve,
nadie la quiere escuchar.
Las huellas quedan perdidas
llegan otros a pisar,
sobrenombres cosechados,
de la vida,. al transitar
Los que me ponderan,. “ el sabio”
grita mi hija ¡“papucho”!
amistades "Edgardín"
.. “la ley”.
un amigo respetuoso,
para los Scouts "el cushé"
“el viejo”, .los cariñosos
¡ahh!. y “pamperito” .también,
. ..otros …¡vaya uno a saber!…
Al que quiere conocerme,
yo lo esquivo,. nada más;
desengaños y entredichos
por mi forma de pensar,
no quiero ilusionar a nadie,
ni me quiero desilusionar.
Y cuando solo me busco
solo entro a meditar
¿quien recordará mi nombre
cuando ya no me vean más?
Quien piensa de lo sembrado
cuando el arado no esta más;
sobra ver lo cosechado,
(hay semillas que ya están),
¡A Dios gracias!, en buen surco
siempre las miro que están …
hay que ver cuando florezcan
¡y vuelvan a germinar!
si las nuevas flores blancas,
.al “viejo” recordaran.
Que ingrata que es la vida
siempre te deja mirar,
aciertos y tropezones
…¡manera de caminar!
Edgardo Ruiz Beldarrain
21-09-09
Me tomé la confianza de llamarte como tus amigos, para agradecer tus elogios y decirte que me encantaron tus dos poemas, recrean situaciones cotidianas y dejan ocupada mi mente para invitarme a reflexionar,sólo en algo no coincido contigo,para mi ,la vida no es ingrata y al mostrarnos nuestros errores ,nos da la oportunidad de corregirlos.Tambien yo,te leo siempre con agrado,ultimamente no te encontraba,y esta última semana,casi no entré por problemas familiares. Un gusto saludarte Edgardín!! .....Susy.....