Voy entrando en tu cama como leona en celo,
ronroneando a la noche mis deseos.
Acomodo mi cuerpo a tus placeres
y me arruyo al encanto de tu sexo...
Despiertas mis instintos animales
y rugo con la rabia de mis celos
y corren mis pasiones a raudales
entregándome completa a tus excesos...
Te atrapo entre mis piernas fuertemente
y enredo mi melena entre tus vellos,
sacudo mis instintos en tu vientre
y marco mis colmillos en tu cuello...
Te muerdo suavemente y con ternura
y me pides gimiendo te lastime.
Te siento entregarte con locura
y al penetrarme, dulcemente gimes...
Exudas tus pasiones, yo las mías,
se confunden los cuerpos en placer,
compartimos con sed las ambrosías
que brotan fieramente de la piel...
Y descargo salvaje mis instintos,
probando cada palmo de tu cuerpo
y haces de mi cuerpo ese recinto
donde dejas marcados tus recuerdos...
En tu selva me pierdo eternamente
y te tomo con locura delirante.
Te entregas a mí completamente,
pues ya eres mi León, mi pasión, mi fiel amante...