Me alimentan los recuerdos,
Puedo sin tú hablar... escucharte
Y a tu voz decirme todo aquello...
Y, sabes... en cualquier lugar...
Donde quiera que pose mi cabeza
Un murmullo de tiernas palabras
Como río que va hacia la mar
Todas ellas puedo escuchar...
Se me llena mi mundo de ti
Y resuenan como haciendo eco
Dentro de mí, el sonido de tus besos...
Y puedo sentir tus labios carmesí,
La piel, ¡ah, la piel está llena de ti
Tu aroma, tu esencia, tu ternura
Aquella caricias por las tardes de lluvia
La promesa de ese encuentro ideal
¡Para qué te miento? ¡Si!, Tú eres mi alimento
Tus manos fuertes de caricias suaves
Mas tan apasionadas que sacan colores
Esos colores de granada que me brotan
Al estar solamente pensando en ti
Por eso es que lo digo para que lo sepas
Me alimento de recuerdos de ti...
Lara Elra Cira
Y también quise escribirte un poquito amiga... Esta mañana vi las plantas de jazmín, vacías, sin sus flores, recordé que cuando se acercaba el día fatal de tu ausencia, no había ninguna. por tanto virtualmente te enviaba margaritas, y ese día, ese día que nunca olvidaré, nacieron muchas, tal es que las recorté y las puse en mi escritorio, raramente no te las envié, y aún sigo con la idea, que tú quisiste que se quedaran conmigo, recuerdas?. Hoy vuelvo a enviarte margaritas, muchas de ellas frescas, como tu sonrisa querida e inolvidable amiga. Siempre te quiero. Solecito.