En la quietud de esta madrugada
El sueño no quiere llegar a mi,
Y me encuentran las horas
Pensando solo en ti.
En la penumbra de esta madrugada,
Pienso en tu sonrisa, que quedó grabada,
Como la tibia caricia de tus manos,
Que sin saber me ilusionaba.
Me encuentro vacía,
Como si no tuviera nada,
Desde que te fuiste, vivo desorientada.
En el silencio de esta madrugada,
Mi ansia de quererte,
Se hunde en el abismo de aquella mirada,
Que sin darme cuenta, todo me lo daba.
El sueño no quiere ser mi aliado
En la soledad de esta noche,
Y como tu, mi amado, se va sin reproches.
En la incertidumbre de esta madrugada,
El sueño insolente no se acerca a mi,
Me quedo esperando tu dulce mirada,
En el sueño que hoy, no quiere venir.