Deje mí mente vagar, mirando lás blancas arenas,del inmenso, desierto. Frente a mí, aparecio, un hermoso lago,de limpidas aguas. Rodeado de bellos arboles,flores de todos, colores. Qué hermosa su quietud,pajaros con cantós, de místicos sonidos, llenando mi alma,de paz de mí Dios. En sus aguas me adentre,saciando mi sed. !!Qué feliz,me sentí!! Nade en sus aguas,dejando que mi cansado, cuerpo disfrutase,de aquel milagro de Dios. En sus orillas me, dormi en mí sueño, hasta mi llegó,una blanca paloma, en su pico,una blanca flor. De pronto desperte,soló me encontre, entre blancas sabanas, de un cuarto, de hospital. Solo fue un sueño,sueño,de luz, que mí cuerpo sano. Luego me dormí,en un largo sueño, sueño,sueñó de amor. En sus brazos me tomo,al vientó nos fuimos, y entre blancas nubes,sus labíos bese, y por siempre suyo fuí. Felíz,felíz,felíz.