Reina del drama

Rota, como un cristal partido en un millón de trozos
por un leve golpe de viento.
Siento no ser el fuerte muro que pensabas.
Siento no ser más sexy.
Siento no ser más lista.
Siento no ser más madura.
Esta histeria pasando por mi cerebro las 24 horas del día.
En directo desde la desesperación.
Siento no ser más tranquila.
Siento no ser más guapa.
Siento no ser más feliz.
Siento no ser más ingeniosa.
Y llorar sin darme un respiro,
y pensar hasta no llegar a nada,
y encerrarme en mi mundo
hasta que pierdo el norte,
es la droga a la que recurro cuando caigo en mil temores.
Y en todo lo que escribo,
con estas ansias de desnudarme,
con esta terrible sensación de asfixia,
muestras asquerosas de mi debilidad,
como una reina del drama de lo cotidiano.