Besé tantos labios, antes de besar los tuyos,
que no sé porque besé tantos, si necesitaba sólo uno.
Besé tantas veces entre amores y a veces disgustos,
que hoy entiendo que sólo esperé toda mi vida
para besar tu boca y dormirme en un sueño profundo.
Besé a veces enamorado y otras veces no tanto,
besando con pasión y a veces con decepción;
pero al besar tus labios me llenaste de tu encanto
para vivir sediento del manantial de tu boca,
y darte los mejores besos que guardé
en lo más profundo de mi corazón.
Besé pensando que los besos jamás se me acabarían,
y fíjate, hoy me faltan besos para besarte vida mía.
Besé sin pensar, que sólo amando se dan los besos
y por eso al besarte a ti ,
supe que en el resto de mis días
no volvería a besar otros labios
porque serán los tuyos
los últimos que yo besaré en esta vida.