El amor de una madre.

El amor de una madre
está hecho de
clemencia,
no espera que el
hijo se lo merezca,
y muere de tristeza
por el hijo ingrato,
pero siempre
permanece
con sus brazos
abiertos.
Su amor es tan
profundo y sublíme
que sin haberlo
aprendido no conoce
rival.
Acaso no hay refugio
más dulce
que el seno maternal
o amparo más
suave que sus
brazos.
No existe sacrificio
donde
para una madre solo
tiene amor.
15/09/2001
Autor de la Poesia: sagitaria del mar-copyright 2003
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