Y NOS CREEMOS QUE SOMOS
De que tanto presumir/si nada en la vida vale,
hasta los ríos grandiosos/son cautivos de los mares.
.oOo.
La tarde ya parpadea
y se le cierran los ojos,
también se cierran los míos
de cansancio, poco a poco.
Que son muchas primaveras,
que son muchos los otoños,
que fueron muchas auroras
felices y de sollozos.
La vida se desvanece,
lo amargo y lo delicioso,
que todo, el maldito tiempo,
lo va convirtiendo en polvo.
Queremos ser sin ser nada
y nos creemos que somos
y en una puesta de sol
lo inmóvil queda en nosotros.
Somos suspiros perdidos,
somos de existencia un soplo,
un gemido vive el cuerpo
y nos creemos que somos.
El ocaso parpadea
y se arropa en su reposo,
yo me cobijo en mis sueños
y me duermo poco a poco.
Por eso como la tarde,
se van cerrando mis ojos.
.oOo.
Madrid 26 Noviembre 2008
-Manuel Cornejo González-
Y nos creemos que somos de la fruta la semilla, del enfermo la pastilla, y no somos lo que somos. Y nos creemos que somos de la roca toda arcilla, del barco la fuerte quilla, Y no somos lo que somos. Creemos somos el cromo que reluce enardecido cuando el fuego lo ha fundido. Creemos somos el tomo del libro que se ha leído y no somos más que olvido. !Bravo! Buen poema, magnífico y certero análisis Su primer diez. Ivette Rosario.