Sì, es verdad,hay dolor en soledad y vacìo en un adiòs que te rompe las entrañas del corazòn. No, no es fàcil de explicar, es un sentimiento de no hablar guardar silencio y pensar cuànto se ha ido y no volverà. Hay quièn prefiere olvidar borrar recuerdos y escapar, huìr tan lejos del ayer y nunca màs volver a ver aquel pàsado. Otros en cambio han de romper en mil pedazos un por què intentando entender dònde muriò aquel querer. Y al final , què queda, no queda nada; ni santo, ni limosna, el fariseo se llevò la plata y el cristiano sus creencias. Nada, no queda nada; ni presente, ni pasado, ni mañana, los retazos de unos besos remendados con el hilo de las canas. Sueños rotos con el eco que producen las palabras cuando se dicen con rabia, cuando no nacen del alma. Sueños rotos que son parte de la nada, del inmenso hueco en que ahora nadas. Nada, no queda nada. Autor : Martin Lunary