Solo y vagando por el mundo voy,
hilando recuerdos del pasado,
solo,escupo el silencio
que brota en mí,
voy vagando por las esquinas,
lloro,miento,
y me escondo,
escondo mí angustía,
al descubrir que miento,
por la cobardía ,
que hay en mí;
lloro y asumo en silencio,
los errores que tuve,
y enseñan a saber y aprender,
para no volver a tropezar
dos veces en la misma piedra. Es mí soledad,
la que me insulta,
la que se deja ver,
la que me hara aprender,
la que me lleva siempre a recordar,
lo que es la amargura pura y dura. ¡ Soledad !,¡ es mí soledad !,
mí ahogo es sincero,
en el mar de mí alma en deshielo,
me entrego al recuerdo,
sufriendo en silencio,
y cansado espero,
a que el tiempo lo cure todo,
y me lo haga saber.
Fernando Pérez Rodríguez