Tu habitación intacta me lleva al quicio de tu recuerdo.
Impregnada aún de tu olor, trato de desahogar tu ausencia con mis palabras.
Nunca inmaginé dolor igual al que siento,mi corazón vuelve a estar en duelo, y una fuerte sacudida vuelve a darme la vuelta por completo.
Quisiera hablarte muy poquito a poco,
despacito junto a tu oído, muy cerca para que nose derramen ni una de mis palabras,
y a tu vera sentir que estoy en casa y os veo en el hogar de mi vida.
La locura de no teneros tiene malgastada mis ganas de seguir,
pero ya veis, aún sigo aqui, luchando como me enseñasteís.