Criaturas que contemplo con adoración,
que el Hacedor la lleno de divina gracia,
por la ternura que brinda en la infancia,
las madres y las maestras sin acepción,
En cada mujer hay un ángel oculto.
Desde que nace ya marca la diferencia,
su entereza incondicional es prestancia,
todas sus acciones realizan como culto.
Hereda heredada desde tiempo remoto.
decir mujer es como decir diosas
y sobre todo; son bellas y hermosas.
Es la razón que adoro con tanto respeto,
y también es la razón de mi vida,
están, en mi corazón éstas diosas querida.
Autor: Alcibíades Noceda Medina