Rechinar de llantas, ayes de dolor,
Ruidos de cristales anuncian el duelo
Carretera envuelta en rojo color
Sangre de inocentes, que vuelan al cielo
Cuando la penumbra quiebra la potencia
De quienes quedaron en vileza heridos
Se oyen las sirenas que abaten la ausencia
Y entre los escombros ya son atendidos
Brazos generosos, ángeles que en vuelo,
Se mueven profundos, llevando la vida
Levantan los cuerpos que están en el suelo
Mientras van curando la mísera herida.
Y seres de blanco se mueven airosos
Corren por la sangre y el medicamento
Quirófano frío que invaden ansiosos
Angustia que vuelve, la espera un tormento.
Se escuchan los rezos, lágrimas que suaves,
Convierten los rostros en crueles calvarios
Y los Padrenuestros que en vuelo de aves
Llevan hasta el cielo, sublimes rosarios.
¡La espera termina, y se abren las puertas
Con pasos seguros, un médico avanza,
Felices lo abrazan las almas despiertas
Porque la Cruz Roja, es más que esperanza!
Poza Rica, Ver., Febrero de 2012
Antonio Reyes Patiño
Poeta pozarricense.
Cuando menos en dos ocasiones, la Benemérita Institución de la Cruz Roja, ha sido instrumento de Dios, para salvar mi vida. Los recuerdos de esos acontecimientos se mantendrán hasta mi último hálito y con ellos, mi gratitud eterna a todo el personal de esa Casa Divina.Este poema, es apenas un retardado y modestísimo reconocimiento a ELLA Y A ELLOS