Quiero dormir en tu vientre, que me ames así,
Que te entregues a mí como en el primer día,
Que me veas a los ojos y me beses de nuevo,
Y mientras tú fuerza de mujer se aferra a mi espalda,
Quiero gritar de dolor al hacerte el amor.
Quiero tu cuerpo que es tan mío como tuyo,
Que tus piernas se queden entre las mías,
Y al llegar al éxtasis, quiero que me pidas hacértelo otra vez,
Esta vez diré que sí, no habrá más obstáculos para no hacerlo,
Porque hemos sido nuestros como en el primer día.
Y esta tarde de amor desenfrenado, no me iré de tu lado,
Quiero quedarme contigo así tal cual, desnudos, expuestos,
Que las sabanas nos mantengan juntos y nuestras manos,
Se mantengan con ganas de seguirnos tocando,
Porque el tiempo te hará justicia y el deseo ilusión.
En fin, quiero que esta entrega sea perpetua,
Que nuestras almas se queden en el tiempo,
Que nuestros labios se sellen en la aurora,
Que tu rocío nos bañe en el firmamento,
Y que me sientas tuyo como yo te siento.