Ya ves, no todo está perdido,
ni siquiera este mundo nuestro
que por serlo, carece de raciocinio,
de lógica, de misterios.
Ya ves, es cruel la vida,
injusto amor compartido
entre berretines adolescentes
y paisajes adultos, penitentes,
y absorvidos por los destiempos.
Ya ves, manejo las probables
circunstancias de las hipótesis
de tanta locura y silencio,
y sin embargo me opongo
a ellas, trasciendo indeclinable
entre las vastas figuras
que tu cuerpo me refleja
y me desangra.
Ya ves, con la simpleza
de tanta investidura,
de logros mercenarios
entre tu alma y la mía,
puedo decirte que te amo
y lo demás.lo demás
es circunstancialmente
innecesario.