Que no terminen tus ojos de mirarme
que tu tiempo eterno sea para amarme.
Que tus brazos no dejen de rodearme,
para que la felicidad entera sea.
Que nunca la ninfa toque su trompeta,
de retirada en esta nuestra tierra,
porque me vuelvo yo una guerrera,
y por tu amor me iría hasta la guerra.
Por ti, detendría a la naturaleza,
para que el tiempo de ella fuera presa,
y no transcurra el segundo del final,
donde la muerte llegue ya fatal!
Por tu amor soy amazona en esta era,
soy sirena de mar sobre la arena,
soy lluvia fresca en tu desierto. . .
fuente inagotable de tiernos besos.