A la sombra del amor

A LA SOMBRA DEL AMOR

Si lo imposible nada fuese,

si lo inconcebible concediese,

que el amor atendiera,

que de lo intangible viniera,

al prodigio se manifestara,

y por digna suerte hablara

con curiosidad insistiría,

sin dudar interrogaría:

¡Oh Amor! –Dime pronto –

¿Qué llevas en tu escondido seno

que a veces a los crueles

los llenas de compasión

y otras, a los muy honestos

transformas sin razón?

¡Oh Amor! –¿Por qué pretendes

hacer de un instante rosas

y otras ver duras espinas

sin humanizar razones?

Inocencia hermosa dime ya;

cuando en el amor se sufre

¿eres herida que duele y no se halla?

¿enfermedad que crece si es curada?

¿o es un todo y no es nada?

¡Oh Amor! –si llegase a ser así;

¡Sin remedio! mil veces te digo:

Siempre ha sido tu proceder ciego

y sensato es el desdichado:

"al corazón nada le interesa,

las razones lucidas del cerebro"

el corazón lleva ciega ligereza,

en las leyes del pensamiento.

¡Oh Amor! si nada me dices,

nada alivia mis interrogantes

o acaso pretendes, oír sordo,

porque en todo estás de acuerdo.

Entonces déjame perseverar

que aún más deseo demandar.

¡Oh Amor! dame la razón;

cuando en el amor se goza,

¿eres fantasía que todo embellece?

¿sentimiento que todo lo llena?

ó ¿elixir que todo lo sana?

¡Oh Amor! niño amor

veraz llega a ser el adagio;

el canto del bohemio soñador:

–la plena felicidad perdura

cuando el verdadero amor madura

porque con amor y sólo amor

hasta morir es dulzura –

Autor Necho Vargas