¡Qué bonito fue mientras duró...!
esos atardeceres,
después de tus estudios
y mi trabajo.
¡Qué horas mas largas sin ti...!
esperando la hora para verte,
y que horas mas cortas a tu lado.
Hoy me ahogo en tu recuerdo
oigo la voz en el silencio,
veo tus ojos en mi mente
noto tus besos, hoy lejanos
y abrazo el hueco de tu ausencia.
Es duro... muy duro esperar
lo que nunca alcanzaré,
y me di cuenta de esos errores
que para mi no lo eran,
solo quería tu amor, que me quisieras,
pero ya ves, comprendí demasiado tarde
esos fatales errores que cometí.
¿Porqué tuve que quererte tanto?
Hoy me encuentro merecidamente sin ti,
por mi culpa y comportamiento.
No te digo mi culpa porque la sabes,
solo deseo que no me guardes rencor,
que seas feliz, todo lo feliz que mereces
que yo maldigo esos momentos
en que te agobié y para siempre te perdí.
Ya no puedo resarcir mi culpa
por ese abismo insalvable,
tan solo me quedo con tu recuerdo.
abrazando el silencio de tu ausencia.
Te pido mil perdones,
mi pecado fue quererte demasiado,
tanto como ahora,
que resignado por tu pérdida
me encuentro solo
y por mi culpa, abandonado,
y a pesar de todo te sigo queriendo
triste si ti, y sin ti, enamorado.
El Toledano Isleño 18120706