Te amo hijo, cuánto los amo,
es fuerte cuando pasan los años
aquella casa llena de niños,
solitaria y vacía, está quedando
perdiendo aquel mágico encanto.
Aún te tengo a mi lado,
me aferro a ti muchas veces,
hace falta regresar tantos momentos,
otros que pudieron ser y por mis ocupaciones
dejé de disfrutarlos junto a ustedes.
Gracias por recordar los pocos escenarios,
tal vez mi memoria ya no los mantiene.
¡Cómo los extraño a todos juntos corriendo,
jugando, contando sus cuentos, bromeando,
sus tareas cumpliendo, para escaparse
de nuevo a al sinfin de sus juegos!
¡Cuánto extraño sus abrazos y su besos,
la visita a la escuela para ver su rendimiento!
¡Cómo extraño sus peleas entre hermanos,
entre juegos y verdades,
se acercaban construyendo,
sus más hermosos y potenciales valores!
Ya crecieron, algunos volaron
a realizar sus propios sueños,
tú que quedas, mantienes la creencia,
de cuidarnos y protegernos,
darnos parte de tu vida, de tu existencia.
Algún día volarás de la misma manera,
buscando nuevos horizontes,
buscando tu musa, también tu quimera,
la melancolía llegará a nuestros corazones,
dándole gracias a Dios, por sus bendiciones.
Los amo hijos e hijas, los añoro cada día,
pido al Eterno, el éxito merecido,
mi satisfacción más grande, cada uno ha sido,
la joya más preciada,que he pulido.