Me llevas de paseo,
a lugares que nunca estube,
me tomas de la mano,
y naufrago en tu mirada,
por razones que no entiendo,
me quedo tildada como una sonámbula,
que por las noches,
no sabe donde está parada,
y eres tu ese dulce resplandor de la mañana,
candido en mis sentidos,
mis sonrisas ya se acaban,
pero tu me llenas de esperanzas,
hombre que me tienes,
hecha para ti,
hueles a mi,
y tu corazón estalla,
esta mañana,
con dulce zonar de campanas,
para que las escuche todas juntas,
como te amo,
es que no puedo dejar de hacerlo,
solo Dios sabrá porque te amo,
solo El, lo sabrá,
yo no lo sé, todavía no lo sé...