La noche anuncia tu llegada, mi piel te espera,
mil emociones se enredan en mi alocada cabeza,
buscándole razón al sentimiento,
intentando decirle a mi emoción que no te quiera.
Que me hace daño el Amor, mas mi alma sueña
y yo solamente quiero llegar a ser tu dueña...
Llegas en silencio, te cuelas en mi cama,
como sombra callada vas cubriendo mi cuerpo,
acaricias mis ansias y te siento resuelto
a amarme locamente,
con tu cuerpo y tu mente.
Me abandono al deseo...te hago espacio en mi piel
y te ofrezco la miel
que nace en mis adentros.
Comienzas con un beso, acaricias mi espalda,
tus dedos me recorren por completo, sin pausa,
y tus labios se beben mi esperanza...
LLegas a los senderos más ocultos,
penetras con tu piel en mis adentros,
sabes como me siento
y entonces me disfrutas.
La humedad de mi sexo, el calor de mi nido,
acomodas mi plexo y entras tu orgullo erguido.
Movimiento insinuante, sudores recurrentes.
Maravilloso amante bebiendo de mi fuente...
Con tu lengua humedeces mis aureolas
y así a ambas le ofreces tus delicias,
pues así, con caricias, ya ninguna está sola.
Mi cuerpo se sacude y se estremece,
un fuego vá quemándome por dentro.
Sabes darme con creces pasión y sentimiento...
Y así al extasis llego...Tu delirio es mayor...
Y yo entonces te ruego...Vuelve y hazme el Amor!...