Te desnudas....
cuando el halo plateado
de la luna emerge con su brillo
en tus partes escondidas,
cuando la voz del alma
te devuelve la lozanía
que otrora, ardiente, entregabas.
Te desnudas...
con el verdadero
amor en las manos
y la ciénaga profunda
de tu universo
sabe de noches
y de estrellas dormidas.
Te desnudas...
ante mi vista
aturdida por el devenir
de un cuerpo maravilloso,
donde fluye el amor
en cada poro de
tu madurez atrevida.
Te desnudas...
y la soberbia se esconde
en los cristales
alucinantes de los ojos,
que perdidos en tu remanso,
callan para siempre
las dudas existentes,
Te desnudas...
ante mí...ante Dios...
ante la vida misma,
amor que resurgiste
cuando ya, los brazos
desvastadores de la muerte,
llegaban para asirme en
su letargo de eternidades
abstractas.