Sobre mi piel,
tu piel;
en diáspora segura.
Bajo tu piel,
cebolla cruda;
de indeleble tesitura. ............
Me despierta un tímido rayo del sol de febrero
y siento un poco de frío en mi cuerpo desierto;
me giro y un sutil movimiento tuyo
me hace pensar que estás despierto.
Sonrío. ...............
Si un día alguien me busca, si se pregunta donde estoy;
que me busque a unos centímetros, cerca de tu estela
Si es de día, que sea sobre mi misma,
porque estaré buscando sentir que me consuelas,
con brío ...........
Si estoy, de mí, demasiado lejos,
con los sentidos muertos,
será porque emprendí mi cruzada inhiesta;
porque crucé de la locura la barrera
porque sentí lleno el fardel de las sospechas.
Pregúntale si acaso necesito
aguijarme para saber que estoy muerta.