Hoy tu vida cambiará.
En mis manos caíste,
y ya tu sueño va ser
tranquilo, porque
recuperaste tu libertad.
Al menos tendrás mi
cariño, mis caricias.
Conmigo conocerás
el amor y a ti nadie
te va a lastimar. En mi
hogar vivirás, seré yo
la que te abrigue con mis
mimos. Jamás nadie va
hacerte daño y cortar tu
vida, solo para hacerse un
abrigo con tu piel.
Por eso quise rescatarte.
Aunque sea tú, serás feliz
en nombre de tantas
chinchillas que han muerto.
Tú no, tú tendrás mi amor
y disfrutaré tu piel, solo para
acariciarte hasta hacerte
dormir en mis brazos; mi dulce
princesita. Con ese gris terciopelo
hermoso que tienes, mis dedos
juegan entre tu pelaje, para
que descubras que no todos
los humanos somos crueles.
Preciosa criatura, bienvenida
mi pequeña, mi dulce Penélope.
Lina
Lagodecristalesazules
05/10/2017
Copyright © 2017
Derechos de Autor Reservados