Noche de luna llena, de radiánte espléndor. Al ático Maria salio, en sus manos migajas de pan. Llegan los cuervos,danzando bajo la luna llena, Maria las migajas le da. Maria en su danza,es dulzura de amor, cual hechízo viviente,su hermoso cuerpo vibra, de amor sensual. Los cuervos siguen su danza, cual vijilántes, de la bella flor. Noche de luna llena,danza y danza, sin cesar,hasta que asoma el astro rey. Desaparese Maria,los cuevos se van. Intrigado el poeta,de aquel baile, un dia deside,al ático subir, sorpresa de sorpresas, en un ataud, blancos huesos, encontro. En el ático preso quedo. Todo por una danza,danza de luna llena, donde la muerte suele esperar. !!Continuara!!
Por
Jorge Tavárez
Puerto Rico/Usa