Solo por ella revivo este sueño,
que sobrepasa razón y quimera,
y continúa después de dormir.
Mi pensamiento la vuelve tangible,
viene a mis brazos parece real,
como relámpago o luz ella llega,
y con sus ojos despierta mi ser.
Imaginé que era un ángel primero,
más cuando vi que miraba mi esencia,
y conocía todo mi pensar,
también, sabía lo que yo soñaba,
y la alegría que iba a sentir.
Imaginé que era otra persona,
pero al quedarse lo supe, era ella,
al despertarme lo vuelvo a dudar.
Puede el amor de verdad ser tan fuerte,
como una antorcha que enciende la vida,
que al encenderse ya nunca se apaga,
o es la esperanza que viene en el sueño.
Lupercio de Providencia