Son tus ojos azules de cielo sin nubes,
Tus labios fuentes de agua clara, para mi sediento
Y el oro brillante de aquellos cabellos,
Un marco perfecto a tu rostro de mujer, angelico.
Tu cuerpo un sol de verano sin sombras, ardiendo
Y es tu piel suavidades de petalo,
Sos la Diosa de amor venerada en mi alma,
Bendiciendo los dias, los meses, los años, mi tiempo!
Con caricias y besos sin renunciamientos.
Me pedistes hoy dia, que te dijera de cuanto te quiero.
Y lo he intentado hacerlo en mis versos,
Pero jamas serian demasiada, mis prosas,
Pues mi sentimiento, es tan grande como el universo.