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 COMPAÑERA

Sentados a la luz de la luna, ya envejecidos de inviernos,

tal vez alguna estrella perdida nos devuelva los momentos,

y más allá de nuestra angustia y nuestro olvido de esos días,

estaremos con la juventud perdida, y con eternos sentimientos.

En nuestra noche larga se prenderán los fuegos que aún tenemos,

en esas calles viejas pobladas de tiempos donde anduvimos,

las lágrimas de tus ojos arrancarán un pedazo de la noche,

y en el constante eco de ese ayer, aflorará lo que aún sentimos.

Tómame la mano amor, compañera de tanto tiempo,

acaricia mis arrugas que con los años van viniendo,

lo que no podrá marchitarnos aunque largo es el eterno,

lo que juntos compartimos y esto, que aún estamos viviendo.

Tómame la mano amor, compañera de tantos sueños,

agradezcamos al cielo por lo que tuvimos y lo que tenemos,

es un hermoso regalo que nos llegó desde el cielo,

dos corazones enormes, poblados de eternos recuerdos.

Cuando se apague la luz del día, y  la noche sea nuestra eterna compañera,

caminaremos juntos hacia los hermosos sueños que existieron,

y recorriéndolos uno a uno nuevamente nos daremos cuenta,

de lo que fuimos, de lo que somos y eternamente lo que seremos.