ABATIDA EL ALMA…YA NO QUEDA NADA
En este tiempo he aprendido que hay una cosa más fuerte que uno mismo. Más fuerte que la voluntad, más fuerte que la razón y más fuerte incluso que los ritmos vitales y la salud. En el caso de que no se acepte, se trata como el cáncer que te invade, que luchas contra él, pero que aunque no quieras, forma parte de ti, con lo que para destruirlo, te tienes que destruir a ti también.
Nunca pensé que existiera algo tan difícil. Tan superior…
Morire per amore
Todo empezó con una foto. Con una caricia. Con unas miradas. Con unas bromas. Con unas confidencias. Con mi admiración….
Recuperé sentidos y sentimientos ya olvidados, todos, todos increíblemente felices.
Sentí que todo el universo se escondía en una voz, en unos ojos, en unas manos,…Todo lo demás, desapareció.
Desaparece. Despierta. Vuelve al mundo. No vale.
Se desvanece. Es imposible. Nunca.
¿Acaso puedo por mi propia voluntad dejar de respirar?
Pero si por lo que sea dejas de respirar…mueres.
Debilidad, cansancio, riadas de lágrimas.
Pensaba que me moría, pero ahora sé que me muero.
Me dejo llevar porque ya no puedo luchar más, prefiero morir a estar ahogándome. Mi muerte será la salvación, y probablemente la de esta enfermedad.
Mi mente quería ayudarme, y autodestruirme de alguna manera. Pero ahora mi cuerpo se suma a este objetivo, coopera debilitándome a mí, al enemigo.
Basta!!. Me rindo… No puedo… Me estoy muriendo… y ya sólo quiero morir…morir por ti.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!