Entré en tu vida sin pensar a pecar.
La trayectoria de tu vida aun era corta,
ni imagine, que de amor se trata,
solo en tu amistad me quise destacar.
En tu compañía ya me sentía deferente.
Fui renunciando a pequeño compromiso,
pues estar más tiempo contigo era preciso,
también me aparté de otra gente.
Sin darnos cuenta creció la pasión,
me adapté a tu vida de adolescente.
El acercamiento íntimo es insistente.
Nos entregamos al amor sin presión.
Cada vez más se buscan nuestros labios,
y la entrega se acrecentaba sin resabios.
Los cuerpos se excitan y sus contornos,
los ojos hablan, solo lubricidad pueden ver,
y que ya llegó el momento del placer.
Se muestran hambrientas nuestras manos.
El precioso instante sentimos en la piel,
los cuerpos desnudos adorna la cama,
no debemos esperar mas, el deseo reclama.
Cuanta perfección hay en esta entrega febril.
Recorro con mis labios tus partes carnal,
tu hace lo mismo, extasiándome hasta la locura.
Como rayo de luz que entra por hendidura,
así voy penetrando en tu parte vital,
entres si, se funden los vientres tan caliente,
ya se hizo el amor, el clímax es eminente.