Siempre escuchaba feliz navidad.
Hasta que supe de qué se trataba,
ya no era un niño, pero yo ignoraba
cual fuera, el motivo y la realidad.
Ya podía probar mi primer trago de sidra,
no soy protagonista, solo espectador,
cajas vacías de regalos a mi alrededor.
El pobre en el tiempo sin clepsidra.
Antes, siquiera estuve con mis mayores.
Ahora también ofrezco fiesta al Niño,
a mis hijos preparo, pesebre con cariño.
Mis viejos no están, pero si los sinsabores.
Evoco estos recuerdos, pero la vida es hoy,
ahora tengo mis niños y fui lo que soy.