Laberintos son la forma del destino
que me toca vivir o habré abordado
sin recordar más que lejano desatino
que me nego el placer, jamás hallado.
En que oscuro anagrama subconsciente
residirán las culpas o la sentencia
que imponen rigores dictados por la mente
con la inequívoca razón de alguna ciencia
Mas sigo ignorando quien soy,donde empieza
el placer, el dolor, mi verdad o la mentida
fachada rutinaria, que implora y reza
por reeditar mas laberintos en mi vida
Y así la realidad se torna incierta
y se diluye lo tangible, en el dilema
de encontrar siquiera alguna puerta
que me permita escapar del anatema
Veo aquí luz, y en segundos es sombra
no alcanzo a rescatar, que ya es perdido
matices, colores o la voz que nombra
salida al infinito abismo en que he caído
Entonces sin luchar, ya derrotado
intuyo y diagramo la coartada
cuando siento que yo soy el soñado
y renazco en luces de alborada.