El mundo que vivimos no es de poco,
mucho lo vive, pero todo lo niega,
no tiene promesa que lo prodiga,
el encuentro es deseoso, pues es parco.
Al hallarnos en libertad amamos
el último segundo, en pasión ciega,
ninguno piensa en lo que entrega,
sin absurdo mitos todo entregamos.
El sentimiento tal vez es más mutuo,
el fervor del momento es asiduo,
total prodigio del amor en calma,
es voluntad de corazones en armonía,
que resuenan los latidos en sintonías.
La fragancia llega a cada alma.
Autor: Alcibíades Noceda Medina