Creo que ya me he acostumbrado,
a que mi propósito del día sea olvidarte.
Y al final del mismo termino derrumbado,
porque cuando duermo empiezo a recordarte.
Creo que es una farsa lo que estoy viviendo,
porque río ante el mundo, pero termino llorando,
como duele que de a gratis esté sufriendo,
y al final de esta estrofa te estoy recordando.
Vete, sal de mi mente,
¿qué no tienes a nadie más que atormentar?
vete, y que sea para siempre,
porque aunque intente dormir, no puedo descansar.
Vete, sal de mi vida,
que no entiendes que de amor estoy muriendo,
vete, que sea la última despedida,
y procura no dejarme ni tantito aliento.
Porque si logro sobrevivir esta madrugada,
no será para alabar a tu recuerdo,
me encargaré que ya no quede nada,
sepultando en tu partida, mi sentimiento.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!