A ti que cortas las mas bellas rosas de un jardín, si, a ti te lo quiero decir, maldito violador, ave de rapiña, ¿ por que forzar a una niña?. ¿ y si es mayor?. Disfrutas provocando dolor. Que Dios y los jueces te condenen duramente, siembras el miedo en un joven corazón de mujer, ¿ no entiendes vil alimaña que ellas ya no seran las mismas?. Temeran por el viento ser acariciadas, tendran toda su vida tu imagen grabada a fuego ardiente. Lágrimas de sangre lloraran recordando aquel día en que con malas artes truncaste sus vidas. Maldito violador de rosas, aparta de ellas tus sucias manos de animal, ellas tienen derecho a vivir en un paraiso terrenal, y tienen sus existencias llenas de cosas hermosas. ¿ que poder puedes sentir haciendo a una mujer sufrir?. Pero claro, tu no conoces de sentimientos, y mucho menos de arrepentimientos, te gusta comer carne robada, o no podrias vivir. Maldito, seas por siempre, que te encierren y nunca te dejen salir, que te pudras entre rejas aprendiendo la lección y pagando por el dolor que provocas y haces sentir, yo esta poesia he querido dedicar, es de alguna forma mi manera de condenar al que a una mujer se atreve a violar, yo te condeno a perpetua cadena, por haber destrozado aquellas rosas que solo querian crecer felices y dichosas.
No sabian que una fiera queria despedazarlas y llevarlas a la mayor pena. Vamos, mis queridas rosas que el no gane, volver a querer, enamoraros, borrar ese amargo recuerdo, teneis que ayudaros, y así amigas mias un buen día os hareis complices del sol y la luna volviendo a ser las mujeres mas dichosas.