¡Fecundo!
Tu hablar lento en una mente
que volaba alta, lejana
cercana a lo divino
y a lo humano,
transformado en palabras,
en anécdota,
en acordes y canciones,
metáforas. Sarcasmos
al aliento de la esperanza.
Tus armas: la idea,
la palabra, la música,
el gen de la creatividad
(imperdonable virtud
para los gorilas)
seguirás con tus afectos
en nuestra memoria
y alimentaremos nuestros espíritus,
con tus guitarras y tus canciones
con tu visión interior
que te permitió revisar lo recóndito de tu alma,
luchando contra la miopía
de sistemas y gobernantes,
egoísmos, brutalidad y mediocridades.
Entonaremos un canto
y una oración,
seguiremos buscando ese mundo,
esa justicia
por la que viviste
Facundo:
¡Fecundo! Herman Vallenilla Domingo 10 /07/2011 3 a.m