Dime que la vida si tiene importancia,
Convénceme de que existen otras salidas,
Ayúdame a alejarme de tanta inmundicia,
Enséñame que la soledad no es mi única amiga.
Si tan sólo pudieras apartar mis demonios
Y callar esas tormentosas voces en mi cabeza,
Ya no quiero cargar con todos esos odios,
Lleva mi alma lejos del demonio de la tristeza.
Muéstrame que la muerte no es mi única compañera,
Y que el tiempo no ahoga mis alegrías,
Llévame a dónde la iniquidad no me siguiera
Y a dónde el suicidio no me acosara.
Toma mi mano y no la vuelvas a soltar,
Confía en mí y en mis tristezas,
Dime que de mí ya no te volverás a separar
Desvanece de mí todas mis agonías.
Pero a pesar de todo no escuchas,
Desangrando mis penas y no me miras,
Estoy cansado de la indiferencia k a mi muestras,
Es hora de poner fin a mi existencia.