La noche me acompaña, aquí me postro y no te robo tu voz, porque el silencio es mio, y no me crees, es testiga mi sombra, y te engaño, es mentira no la tengo, pero no quiero tu voz, quiero tu rostro, que mis párpados se cierren, y comtemplen tu mirada, pero está oscuro no la veo, ciega la noche, ciego mi sueño, ansioso mi ser por ver tu cara, y no la veo. Mi sueño palpa tu espacio, la noche se alarga, como un lago sin fín, es un muerto vacío, esa persona eres tú, y no estás ahí, no te veo. Mañana al despertar, al ver triste la luz, pensaré. que tú me engañaste a mí, no te creeré, porque anoche tu presona no estaba, donde yo quería que estuviese, y no la ví, porque es mentira, no estaba ahí.