Mi piél esta curtida de dolor
agoniza por culpa de tu desición,
quiero verte cara a cara
y oir melodias que se mezclen con tu voz,
no soy el mismo que celaba tu sonrisa,
el que velaba tu sueño en la cama,
y cuidaba de tu baño a la hora del amar.
Mi piél esta cansada, ya no tiene ganas
de volver a la cima, visitar tu morada;
no soy el mismo que una vez conociste,
no soy yo, el que una vez decidió
bajar las estrellas, y llevarte a la luna,
no soy el mismo que perdió la razón,
aquel que enloqueció la primera vez que huiste,
y que por tu fidelidad, cambió,
ya no soy el mismo.