Despedida

Despedida

Si he de vivir sentenciado con  mi aflicción, de ver expirados tu deseo y tu apego a mi entusiasmo frente al ocaso de mi existencia, llevaré conmigo entonces: la luna que para ti descolgué del cielo y adornaré con ella el valle oscuro de mi peregrinar sin rumbo, para así no sentirme perdido.

Buscaré en la música la espiritualidad anhelada y cruzaré el portal a donde no haya juicios ni temores… me llené de goce con las melodías que alguna vez juntos escuchamos.

Amaré la naturaleza como a ti, porque eres parte de ella; me regocijaré en sus formas y colores, y la cuidaré como a tus rosas, aunque a veces me puncen sus espinas. 

Buscaré ser coherente con mis ideas y proclamaré entonces al entorno mi existencia, así podré sentir que sigo vivo.

Perdonaré a quienes me causan ira y resentimiento, y evitaré convivir con odio, aun cuando no haya omisión ni olvido. 

Amaré de ti el “todo”. Descubrí contigo el sentir del amor verdadero, y alcancé a tu lado, a vivir mi eternidad en ese solo instante.

Nos llenamos de tanto amor que te deleitaste al malgastarlo.

Recurrí al don de tu empatía para comprender a través de ti mis emociones, ya que mis sentimientos te los entregué al desnudo desde aquel primer día. 

Dame ahora el valor para enfrentarme a mi vergüenza.

Dame en tus palabras un poco de alivio a mi tristeza.

Dale un digno pretexto a mi inminente salida.

Presume entonces de mi amor constante e inalterado. No podría llenar con dignidad el vacío de tu ausencia, ni darle así honor a mi agonía; esa es la única riqueza que me queda… la mantendré incólume y la llevaré conmigo en mi partida.

Óscar Herrera M.

New York

Marzo 20-2023