Si yo fuera un Dios, podría acariciar cada rincón de tu corazón,
beber cada gota de tu espacio...
Podría gritar a los vientos este amor prohibido
y los vientos llevarían mi beso a tocar tus labios...
Si yo fuera un Dios, podría abrir los cielos
y correr entre las estrellas de tu mano,
podría contarle a los duendes de los campos olvidados,
que eres mi piel, mis ojos, mi aliento, mi sueño mas amado...
Si yo fuera un Dios, podría robarle a la noche las horas del descanso
para besar tu alma, para perderme en tus brazos,
para danzar ante la luna un antiguo y misterioso baile mágico...
Si yo fuera un Dios, podría escribir poesías
repitiendo tu nombre sin hacer daño...
podría explicar este sentimiento que no conoce barreras,
ni distancias, ni fracasos......
No tendría que esconderme en los silencios y morir de amor callando...
No soy un Dios vida mía,
tan solo un caminante, un amante enamorado
RosaGranaina
12/4/2007