Álla en aquel rincón,
donde se escucha un triste suspiro,
¡Es que la risa se ahuyenta!
De tristeza está mi corazón.
Me parece que falta algo,
más allá de aquel rincón.
¡Ya salgo!
a buscar un poco de ilusión.
¡Quiero verlos reir! sentir su versar de amar. Los amigos deben seguir, y acariciarlos sin poderlos mirar. El que va por este mundo, haciendo daño a cualquiera. y lo digo en un credo profundo, ¡No tienen perdón de Dios! y el mismo diablo lo espera. Allá en aquel rincón, de poetas tan queridos, Hoy le ofrezco una canción, a estos años vividos. El Sol de mis abrazos y admiración. Y en medio de mi filosofia popular, ¡Díganme ustedes señores! Si no merece desprecio, quien funda pretensiones, Sólo en palabras de necio. Son varios los que se han ido, y les quiero hablar, No sientan el olvido,
regresen que aqui lo vamos a esperar.
Juntos a sus versos tan sentido,
y esa bella manera de rimar. Que pocos saben aquellos, que vivimos para escribir. Que la poesia es la luz y el destello, nuestro alimento del alma ¡el vivir!´ Y para todos ellos, reciban mi sentir. Más allá de aquel rincón, su flor no debe morir. SOL.